@Agustín Rivera - (Sevilla) 05/02/2012 (06:00h)
El proyecto de la Torre Pelli de Cajasol no sólo divide a los ciudadanos de Sevilla y genera un rechazo de la Unesco que conllevaría la retirada de la categoría de Patrimonio Mundial de la Humanidad al conjunto del Real Alcázar, Catedral y Archivo de Indias. También supondría un grave perjuicio a la economía de la capital andaluza. Principalmente, por el número de metros cuadrados de oficinas disponibles que existen actualmente en Sevilla. En la capital andaluza están vacías el 12%: en Sevilla hay 136.000 metros cuadrados de oficinas sin alquilar ni vender. Sólo en la isla de la Cartuja, donde se construye la Torre Cajasol, hay 21.000 metros cuadrados disponibles, según un estudio inmobiliario de Inerzia de 2011. La consultora está elaborando el informe de 2012, que elevará según todas las previsiones el número de oficinas sin utilizar.
El presidente de la Confederación de Empresarios de Andalucía (CEA), Santiago Herrero, recuerda que el rascacielos sevillano se proyectó en unos años de “enorme bonanza” empresarial donde el negocio inmobiliario era “seguro”. “Esta sería una buena zona para la torre porque cualquier edificio de aquí [la Cartuja] no se corresponde con la arquitectura tradicional de la ciudad”, señala Herrero en una entrevista concedida a El Confidencial.
Con todo, Herrero señala que a la Torre Cajasol no le ha beneficiado nada “una polémica estéril” en Sevilla y, sobre todo, “construir algo que estará vacío durante mucho tiempo y con una parte de la población que está en contra. A mí ya me pareció muy feo en su día el edificio Torre Triana porque rompía con la visión que se tenía desde esa parte de la ciudad”, destacó el presidente de la CEA a este diario.
En 2009, aún sin el impacto de la crisis económica y financiera, Cajasol vaticinaba unos datos que ahora suenan a muy optimistas. Un informe de la consultora Deloitte vaticinaba 4.000 empleos directos, de los que el 71% corresponden a la construcción y seguros del edificio. El impacto directo e indirecto será de 212,46 millones de euros y tendrá un retorno fiscal de 27,1 millones de euros. El estudio precisa que el efecto inducido sobre el PIB sevillano y andaluz será de 68,6 millones de euros y un número de empleos superior a los 1.200.
La construcción del rascacielos de la isla de la Cartuja, de 42 plantas y 178 metros de altura, está prevista que termine el primer trimestre de 2013. La caja sevillana ya ha ejecutado el 30% del proyecto. El presupuesto, cuyo coste se evaluó en 250 millones de euros, ya se ha disparado hasta los 300 millones de euros. Como ya publicó El Confidencial el pasado 24 de enero, la Torre Pelli no sólo no se tumbará, sino que crecerá en altura.
El presidente de Banca Cívica-Cajasol, Antonio Pulido, está dispuesto a plantar batalla hasta el final. Pulido sostiene que seguirá con la construcción del rascacielos de la Cartuja a pesar del riesgo de que el conjunto histórico del Real Alcázar, la Catedral de Sevilla y el Archivo de Indias pierda la condición de Patrimonio Mundial de la Humanidad por parte de la Unesco. “En absoluto están en peligro estos monumentos”, intentó calmar Pulido, tras defender la posibilidad de “conjugar la viabilidad del proyecto con los intereses de la ciudad”. El presidente de la entidad financiera argumenta “importantes errores técnicos” del informe de la Unesco. “La torre no está a 600 metros de la Giralda, sino a 1.700 metros”, destaca el responsable de la caja sevillana
1 comentario:
La Torre Cajasol es un atentado al urbanismo, a la cultura y a la economía. Es un proyecto condenado al fracaso y un chantaje a instituciones democráticas, Ayuntamiento , Junta y Consejería Justicia. Este proyecto, ahora auspiciado por Bankia, arrastrará a esta institución, al descrédito e incrementará la ruina económica en la que ya se encuentra.
Publicar un comentario