domingo, 28 de noviembre de 2010

DEL VALLE Y PÉREZ ESCOLANO

Ana Ávila, Túmbala; Ventura Galera, Arquitectura y Compromiso Social; José García-Tapial, Jesús Lara, Ecologista en acción, grupo de Sevilla. Fernando Mendoza, Manifiesto contra la Torre Cajasol y Juan Antonio Morales, ADTA

Comentamos dos entrevistas realizadas a Manuel del Valle, ex alcalde de Sevilla y Víctor Pérez Escolano, Arquitecto, ex concejal de Urbanismo y profesor de la ETSA de Sevilla. Las entrevistas han sido publicadas el Domingo 21 de Noviembre en ABC de Sevilla y en Diario de Sevilla, respectivamente.

En ambas se pueden detectar dos posturas divergentes existentes acerca de la Torre Pelli dentro de la misma tendencia política.

Comenzamos por Manuel del Valle, Alcalde de Sevilla entre 1983 y 1991, en que optó por retirarse y volver a su bufete profesional. Político sobrio y honesto, se podía estar en desacuerdo con él, pero mantenía intactas las señas de identidad de la política avanzada: decir la verdad y mantener una impecable ética. A sus 71 años mantiene la misma actitud: la verdad aunque duela.

MANUEL DEL VALLE
Abc de Sevilla. Fragmentos de la entrevista de María Jesús Pereira.


“—La Torre Pelli continúa sus obras, ignorando a la Unesco. ¿No cree que se está pecando de soberbia?

—No soy enemigo de que se haga, pero es verdad que generará un problema de tráfico. Por otro lado, la institución financiera que promueve la Torre Pelli se debe a los impositores, a diferencia de los bancos, que tienen su capital. El negocio de Cajasol no es hacer rascacielos, sino administrar el dinero de los depositantes y obtener un beneficio para revertirlos a la sociedad. El construir un rascacielos no está entre las obras sociales. Puede servir para ganar dinero, pero no en estos momentos. Basta pasearse por Sevilla para ver que todo se vende y se alquila. ¿Qué se conseguirá con la Torre Pelli? Despoblar más de oficinas el centro de la ciudad."
Ante la Torre Pelli se pueden tener opiniones desde distintos puntos de vista. Manuel del Valle destaca tres problemas gravísimos que ya se han argumentado en artículos, pronunciamientos públicos y, sobre todo en el “Libro Negro de la Torre Cajasol”: los atascos de tráfico, el desajuste de que una Caja de Ahorros especule con el dinero de sus depositantes y la inconveniencia de hacer 90.000 metros cuadrados de nuevas y carísimas oficinas en una ciudad económicamente en ruinas.

Víctor Pérez Escolano es arquitecto, historiador y catedrático de la ETSA de Sevilla, a la vez que ha desempeñado diversos cargos públicos: Director del Museo de Arte Contemporáneo de Sevilla; Concejal de urbanismo en la primera corporación democrática sevillana; Director General con la Junta de Andalucía; Premio Andrés de Vandelvira, entre otros.

La opinión que expone Pérez Escolano sobre la torre responde a un criterio mayoritario entre los políticos actualmente en el poder. Conjuga afirmaciones erróneas con opiniones contradictorias.

De la entrevista seleccionaremos los párrafos más significativos para comentarlos a continuación.


VICTOR PÉREZ ESCOLANO


Diario de Sevilla. Fragmentos de la entrevista de Maria José Guzmán.



“-¿Hay un urbanismo de izquierdas y de derechas?

-Hay un urbanismo progresista y de valores sociales, en el que el interés general y público prevalece; y un urbanismo en el que lo que prevalece es el interés privado. Basta con comparar las leyes del suelo que hizo el PP en la época de Aznar y que están en el origen de toda la burbuja del ladrillo. Pero, a veces, una institución gobernada por un partido de izquierdas puede estar haciendo urbanismo de derechas.

-¿Y lo contrario?-Teóricamente también puede suceder. Aunque, a veces, se trata de pura demagogia, es el típico argumento de la creación de puestos de trabajo. Ciertos empresarios hablan de esto ahora y lo hacían en mi época. Recuerdo debates en la radio con la patronal, que decía que se estaba generando paro al no conceder licencias de obras.” 


Nos queda la duda de si la actuación de la Torre Pelli procede de un “urbanismo progresista y de valores sociales en el que el interés general y público prevalece; y un urbanismo en el que lo que prevalece es el interés privado.” Aquí lo único que prevalece es el interés de los dirigentes de una Caja de Ahorros, coordinados con el Ayuntamiento de Sevilla y una consultoría de proyectos para hacer el rascacielos caiga quien caiga, cada uno por un motivo diferente pero complementario: la Caja de Ahorros, beneficiarse de la edificabilidad extra que le ha concedido graciosamente el Ayuntamiento; éste, por el supuesto prestigio que proporcionan las políticas  de llenar la ciudad de “artefactos desmesurados y propagandísticos” (PGOU dixit); por último la oficina de proyectos y constructora, proyectar y construir la torre con los beneficios que ello supone.

Nunca se ha justificado la torre por parte de Cajasol o del Ayuntamiento de una forma rigurosa. La única justificación que se ha manejado ha sido “el típico argumento de la creación de puestos de trabajo”. Pura demagogia al parecer.

“-Somos muy dados a discutirlo todo. Mire lo que ocurre cada vez que se habla de peatonalización.

-Primero nos cabreamos y luego tocamos las palmas.


-¿Pasará eso cuando se levante la Torre Pelli?

-Este tema hay que analizarlo también históricamente. Esta torre deriva del plan general de Fustegueras y debía definirse con un plan especial. Este proyecto tuvo su periodo de exposición pública y pudo ser alterado en ese momento procesal. Si no se hizo, el proyectosiguió adelante. Hay que ser más diligente.

-La localización de esa alta densidad en ese lugar plantea un problema con la Unesco.

-Según tengo entendido, esa densidad en esa posición responde a un convenio previo de la época de Rojas Marcos. El nuevo gobierno podría haber discutido ese acuerdo y se hubiera revisado. Las cosas hay que hacerlas en su momento. Y luego hay otra cosa que se va sumando: yo creo que al final pesa que César Pelli no es el mejor arquitecto ni éste es su mejor proyecto.”
Posiblemente mal informado, Pérez Escolano no sabe que la torre no está incluída en el Plan General. Estuvo en la aprobación inicial, pero se quitó aceptando las alegaciones del Partido Andalucista y ADEPA. En el Plan General no está, por tanto, prevista la torre en absoluto. Al contrario, sobre el solar de la Torre sólo se pueden construir cuatro plantas, no cuarenta.

No existe Convenio alguno del pasado, ni de Rojas Marcos ni de nadie. El único Convenio que ha existido es el que se firmó el 16 de Marzo de 2005 por el actual alcalde.

En cuanto a ser más diligente, las Asociaciones ciudadanas que están en contra del proyecto llevan dos años de dedicación, luchando contra intereses muy poderosos, por desvelar la verdad de todo lo que rodea este atentado urbanístico y para evitar que se construya. Pero no es cuestión de “diligencia” por parte de los ciudadanos, sino de honradez y transparencia por parte de la clase política. Resulta lamentable que aún se pueda defender como máxima participación ciudadana en el planeamiento, el mezquino marco establecido por el franquismo (y por cierto no mejorado en 5 años), del mes de Información Pública y el BOP. Y si se te pasa, aunque sea mediante engaños, has perdido tus derechos.

La intención de construir la Torre fue deliberadamente ocultada en el PERI: no constaba ni en los planos ni en la Memoria. Tampoco se mencionaba en la Propuesta que se elevó al Pleno y, por supuesto no se indicó en los obligados anuncios del BOP y de la prensa. En esas circunstancias ¿cómo podían los ciudadanos conocer lo que se pretendía hacer. Fue un fraude y como tal se ha denunciado ante los Tribunales de Justicia. En este fraude a la participación pública estuvieron implicados, no solo el Ayuntamiento de Sevilla sino también las Consejerías de Cultura y Obras Públicas de la Junta de Andalucía, con su silencio, como hemos denunciado asimismo. Por cierto, todas nuestras afirmaciones pueden demostrarse documentalmente de modo amplio en cualquier momento y ante cualquier persona interesada en ello.

Ya sabemos que “César Pelli no es el mejor arquitecto ni éste su mejor proyecto”. Aclaremos, no sólo no es su mejor proyecto, es que no es su proyecto siquiera: La Memoria del Proyecto dice textualmente:

“El proyecto se encarga a AYESA, como sociedad proyectista y se hacen cargo del proyecto los siguientes técnicos redactores: Miguel A. Pontijas Calderón, Daniel Herrera Calle, Joaquin G. Salas Álvarez y Manuel Osuna Llinares. El proyecto se basa en los diseños realizados en colaboración con el estudio de Pelli Clark Pelli Architects”

Dejemos de hablar de Torre Pelli y hablemos entonces de Torre AYESA, o de Torre Pontijas y Otros. Pero no confundamos más. Ni el mejor arquitecto con el mejor proyecto podría hacer una torre de cuarenta plantas en un lugar histórica y patrimonialmente sensible como es la fuga de perspectiva del Puerto de Indias en Sevilla.

“-Rectificar ahora es más difícil. Ya se ha adjudicado la estructura.

-Cajasol ha sido muy hábil transmitiendo que lo que se veía en las sesiones de la Unesco le era favorable. El problema con la Unesco existe. Hay quien dice que bueno, que pongan a Sevilla en la lista de patrimonio en peligro... Sería conveniente hacer un poco de pedagogía.”
Realicemos otra precisión. Fue el Ayuntamiento de Sevilla, en la persona de Maribel Montaño , quien engañó deliberadamente a los ciudadanos, afirmando que la Unesco había aprobado la Torre. Cuando se publicó el acta definitiva se comprobó que la Unesco, no solo no la había aprobado sino que pide la reconsideración del proyecto.

O sea resumiendo: que el proyecto que va a destruir para siempre el paisaje histórico de Sevilla se ha aprobado porque, a los ciudadanos se les pasó la fecha de publicación del Plan Especial y porque además, el Ayuntamiento mintió sobre los resultados del Comité de Patrimonio Mundial de Brasilia. No creemos que esto sea un ejemplo de un “urbanismo progresista y de valores sociales, en el que el interés general y público prevalece”

“-Ahora que estamos en eterna precampaña electoral, ¿qué consejo le daría a los candidatos?

-En resumen, que digan nunca máis a la invasión del petróleo del ladrillo y que tengan una mirada cultural, paisajística, es hoy crucial.”
¿Cómo se puede decir “nunca mais” a todo menos a la torre Pelli? ¿O es que la torre no es puro ladrillo y no rompe con una “mirada cultural y paisajística”?

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Mientras que Del Valle dice NO A LA TORRE, Pérez Escolano es SI PERO NO, NO PERO SI. En qué quedamos, señor Gurú del Socialismo Leninismo Capitalismo sevillano, ¿ Está usted de acuerdo con la Torre Pelli o no? ¿Cualquier atentado urbanístico es justificable si lo hace el PDOE?

Anónimo dijo...

Ya se ha visto lo que ha pasado en las elecciones catalanas con esta gente. No se puede estar en misa y repicando, o sopa o teta. La gente se da cuenta de que practican el doble pensar, es decir, decir a la vez una cosa y su contraria. Ya no cuela, habeis llevado el país a la ruina y vais a pagar por ello.

Anónimo dijo...

O sea, el señor Escolano está a favor de la torre y en contra también. Es un maestro de la ambiguité. en ningún caso dice que le parece, todo es dar vueltas alrededor del tema, como un gato cuando se busca la cola. todos son temas de tramitación pero en ningún momento dice cual es su opinión, si es que tiene alguna. Identifiar este desastre con mala arquitectura es muy, muy cínico. Esto no tiene nada que ver con la arquitectura, es simplemente una agresión contra el paisaje de Sevilla. Y este es el ideólogo del PSOE, vaya tela...........

Cajero dijo...

No os preocupeis por la torre. La situación económica de Cajasol es tan mala que tendrán que pararla y echar al Pulido. Y ya se sabe....muerto el perro se acabó la rabia. en el año y pico que quedan para las elecciones generales, Cajasol está lista de papeles, como casi todas las cajas.